Las invitaciones son la cara de tu celebración. El estilo de la ceremonia y su personalidad como pareja deben representarse en las tarjetas.
¿De qué manera? ¿Cómo lograr las invitaciones perfectas?
Para encontrar el diseño ideal:
- Antes que nada deben pensar en sus características como pareja: si son tradicionales, multiculturales o si buscan cosas nuevas. Si se apegarán a las reglas convencionales o si tratarán de innovar.
- Decidan si prefieren imprimir tarjetas o si quieren una invitación electrónica:
Por un lado, las impresas requieren de un presupuesto mayor; sin embargo, entregar la invitación física es un gesto muy especial, muchos invitados las conservan como un recuerdo.
Pero por otro lado, están las tarjetas electrónicas, que se pueden encontrar gratis y los diseños son interactivos y rápidos de hacer. Si eligen esta opción deben asegurarse de tener los correos electrónicos correctos de todos sus invitados y que los consulten periódicamente.
- No debes olvidar proporcionar todos los datos de la ceremonia y la recepción. Escribe la dirección exacta y si es posible un mapa. Puedes imprimir pequeñas tarjetas con esta información y colocarlas dentro de la invitación.
Innova
- Una invitación a una boda puede convertirse en una obra de arte. Puedes pedirle a un amigo diseñador o un artista que elaboren una tarjeta todos juntos. Olviden las normas del pasado, sean lo más creativos que puedan.
Las notas de agradecimiento
Los gestos de agradecimiento son tan importantes como toda la boda y pueden ser de distintos tipos:
- Notas escritas personalizadas: son pequeñas tarjetas con sus nombres impresos en la esquina. Se escriben a mano y el texto se dirige específicamente al invitado.
- Notas universales: son tarjetas con textos ya impresos. Facilitan el proceso ya que sólo requieren rotularse, sin embargo, son más impersonales.
- Notas electrónicas: Pueden escribir notas personalizadas o buscar tarjetas universales en algún sitio web y mandarlas por correo electrónico.
Recuerda:
Piensen en sus invitados, de seguro hay mucha diversidad.
Así como pueden usar las redes sociales para mandar saludos de agradecimiento, también pueden usar medios convencionales como el teléfono; a nuestra querida abuelita o al tío preferido podemos llamarles o ir a visitarlos. Y podemos llevarles una caja de postres, no hay reglas. No importa la forma, solo que lo hagamos.